Descripción por los arquitectos. Desde la calle, la casa parece mínima.
Situada en un gran bloque que cae hacia la playa del puerto, muchas capas de espacios habitables se revelan progresivamente a través de la casa.
Las habitaciones privadas, la sauna y el gimnasio se encuentran en el pabellón sur, abierto al aire natural y la luz a través de un patio ajardinado, que también revela algunas de las rocas de las que depende todo esto.
Los espacios familiares están en el pabellón norte, conectados a su contraparte meridional por una pasarela enmarcada con aletas de cobre escultóricas que filtran la luz y permiten vislumbres.
La cocina y comedor están en la planta superior, mientras que por debajo del nivel de entrada, debido a la caída escarpada del sitio, se ofrecen fantásticas vistas.
Debajo de este, el gran salón habilitado por la topografía a un espacio de dramática doble altura, llega a la reserva a través de una gran cubierta, un pozo de estar con fuego y una piscina con borde de cascada.
Además de las medidas de sostenibilidad obligatorias de hoy en día para el tanque de agua de lluvia, aislamiento de alto nivel, iluminación de baja energía, etc., la casa ha sido desde su diseño conceptual inicial, concebida para minimizar el uso de energía.
La agrupación de habitaciones alrededor del patio juega un papel importante proporcionando una exposición significativa a la luz natural y el flujo de aire a todas las salas de estar, minimizando la necesidad de aire acondicionado y luces artificiales.
La ventilación cruzada proporcionada hará que el uso de aire acondicionado sea innecesario. La construcción sólida de una gran masa junto con la plantación omnipresente contribuye a un control natural del microclima.
No sólo es agradable observar una azotea verde al aumentar la zona ajardinada, también es eficiente para aislar el tejado.
La visión mediante grandes ventanas es imprescindible para conectar visualmente con el magnifico entorno. Sin embargo, se han restringido las fachadas norte y sur. La articulación de ellas optimiza el sombreado natural en verano y maximiza la ganancia solar en invierno.
La calefacción se proporciona por medio de un sistema de calor bajo el suelo.
Un sistema de baterías aprovecha la electricidad generada por la energía solar, haciendo que la energía de la casa sea independiente.